La región oriental de Mallorca cuenta con playas azotadas por el viento, pueblos pintorescos y Manacor, la segunda ciudad más grande de la isla. La región oriental de Mallorca, que combina complejos turísticos de playa clásicos en los que los turistas aprovechan al máximo su tiempo de playa con algunos pueblos históricos y tradicionales, tiene mucho que explorar.

Desde municipios de tamaño medio como Campos, Llucmajor, Santanyí y Felanitx hasta impresionantes playas de calas definidas por aguas turquesas y acantilados rocosos, así como una reserva natural y el hogar del fabricante de sal de la isla, el sur de Mallorca tiene su propio estilo relajado y auténtico.

En el vasto terreno de la región noroeste de Mallorca, donde se encuentran las montañas de la Serra de Tramuntana, se encuentran encantadores pueblos en lo alto de las colinas, infinitas rutas de senderismo y ciclismo, playas rocosas, antiguas fincas de piedra y una apreciación de la vida rural y agreste.

La región suroeste de Mallorca es una cautivadora mezcla de impresionantes paisajes, rica historia y ciudades animadas que atraen a visitantes y residentes a tiempo completo que buscan comodidad, relajación y exploración. Esta parte de la isla es famosa por sus populares pueblos costeros y por una historia que se desarrolla a través de su arquitectura antigua y su patrimonio cultural.

Palma de Mallorca es una ciudad rica en historia, cultura y belleza. Situada en la bahía de Palma, la capital se extiende a lo largo de la costa y el interior e incluye una multitud de barrios distintivos con su propio estilo. Una mezcla de mar y sol y una animada vida urbana hacen de Palma una de las ciudades mediterráneas más atractivas de la actualidad.